Los precios dinámicos han sido noticia últimamente por todas las razones equivocadas.
En la primera página de una búsqueda del término en Google sólo aparecen artículos sobre la reciente debacle de la venta de entradas de Oasis y los esfuerzos reguladores para controlar los precios dinámicos o prohibirlos por completo.
Probablemente ahora sea un buen momento para aclarar algunos datos sobre los precios dinámicos para los operadores turísticos que puedan estar preocupados por acabar como Ticketmaster al ofrecerlos.
En este post, veremos qué salió mal con Ticketmaster, por qué todo el mundo está tan enfadado y cómo los operadores turísticos pueden aprender del escándalo y enfocar los precios dinámicos de forma responsable.
¿Qué es la tarificación dinámica?
En pocas palabras, los precios dinámicos son una forma de ajustar automáticamente los precios en función de la demanda.
Profundizamos en ello en «Precios dinámicos 101«.
Las principales ventajas de la tarificación dinámica son la maximización de los ingresos y la mejora de la utilización de la capacidad.
Si se hace bien, la tarificación dinámica te ayuda a llenar plazas, ganar más dinero y recompensar las reservas anticipadas con descuentos.
Los hoteles y las compañías aéreas llevan años utilizando la tarificación dinámica para ajustar los precios en función de la demanda, la estacionalidad, los días de la semana y los acontecimientos especiales.
Uno de los efectos de los conciertos con entradas agotadas, como los de Oasis y Taylor Swift, que provocaron la reacción de Ticketmaster, ha sido que los hoteles han aumentado drásticamente el precio de sus habitaciones e incluso han cancelado las reservas existentes para los fines de semana de esos conciertos.
Ticketmaster & Oasis, «¿dónde fue todo mal?»
A principios de septiembre de este año, la venta de entradas para los conciertos limitados de reunión de Oasis generó una enorme demanda y largas colas virtuales en Ticketmaster.
El modelo de precios dinámicos de Ticketmaster ajustaba los precios a la demanda o «reflejaba el valor de mercado», como han dicho los defensores de su política.
Los fans que tuvieron la suerte de llegar a la página de reservas tras horas en la cola se encontraron con entradas que se vendían por más del doble de su valor original.
Las subidas de precios enfurecieron a los fans, generaron memes y provocaron llamamientos para que los reguladores gubernamentales intervinieran en el Reino Unido e Irlanda.
Ticketmaster, Oasis y la propia práctica de los precios dinámicos se enfrentaron a duras críticas.
Lecciones para los operadores
La buena noticia para los operadores turísticos que utilizan precios dinámicos es que es muy poco probable que alguna vez se enfrenten a una demanda tan extrema que haga que su sistema de emisión de billetes establezca subidas de precios desbocadas.
Dicho esto, el incidente subraya algunos principios clave para utilizar la tarificación dinámica de forma eficaz y responsable.
La fijación de precios es un equilibrio entre la satisfacción del cliente y el beneficio
El lío de Ticketmaster nos muestra un extremo del equilibrio entre precio y satisfacción del cliente.
Al inclinar tanto la balanza a favor del beneficio, Ticketmaster hizo que los clientes se sintieran estafados y dañó la reputación de los artistas para los que vendía entradas.
La transparencia es vital
Si los aficionados hubieran sabido que los precios serían altos debido a la demanda y que la disponibilidad sería limitada, las cosas podrían haber ido de otra manera.
Pero la falta de transparencia avivó la indignación y empeoró mucho la situación.
Cuando estudies tu propia estrategia de precios dinámicos, considera la posibilidad de informar a los clientes de por qué determinadas horas y temporadas cuestan más o tienen menos disponibilidad.
Lejos de enfadar a los clientes, puede que esto te ayude a comunicar el valor de las horas punta y las ofertas de última hora.
Prepárate para los picos de demanda
Es muy poco probable que tu negocio turístico experimente alguna vez el tipo de demanda demencial que generó la reunión de Oasis.
Pero factores como el turismo de masas, la viralidad de las redes sociales y el patrocinio de personas influyentes pueden contribuir a una demanda superior a la habitual.
Suele ser un buen problema, pero merece la pena tener un plan para ello y saber cómo responderá tu configuración de precios dinámicos.
Conoce las políticas de tus OTAs
Oasis y sus directivos se han distanciado de Ticketmaster diciendo que no sabían que se utilizarían precios dinámicos.
De nuevo, aunque es improbable que una relación con terceros traiga tanta mala prensa a tu negocio, merece la pena entender cómo las OTAs con las que trabajas fijan sus precios y asignan la disponibilidad.
No se trata sólo de evitar un fiasco de precios, sino de buen sentido comercial.