Como cualquier asociación, obtener los mejores resultados con un DMC requiere un poco de trabajo, algo de estrategia y retroalimentación para evaluar cómo va. El toque personal que estos proveedores cualificados aportan a su trabajo puede hacer que estas relaciones comerciales sean muy gratificantes.
Aquí tienes algunos consejos para establecer una colaboración fluida que saque lo mejor de ambos equipos.
Ten claro lo que quieres
Antes de ponerte en contacto con una DMC, tómate un tiempo para definir qué significa el éxito para esta asociación.
¿Quieres mostrar a tus clientes la cultura local y alejarte de las multitudes de turistas?
¿O tal vez ofrecer una experiencia «VIP» inolvidable?
Compartir una visión clara desde el principio ayuda al DMC a comprender tus objetivos y a idear formas creativas de alcanzarlos.
Son expertos en su región, así que cuanto mejor conozcan tus expectativas, mejor podrán cumplirlas. Puede que te ayude empezar por pensar en lo que no puedes hacer desde casa y qué retos únicos presentan sus regiones de los que es mejor que se ocupe un local. Por ejemplo, el transporte puede ser una pesadilla en un lugar, por lo que querrás que un DMC se encargue de la logística, mientras que otro destino puede ser demasiado accesible, en cuyo caso un DMC puede ayudar a tu grupo a encontrar lugares menos conocidos.
(Para más información sobre qué es una DMC, consulta ¿Qué es una empresa de gestión de destinos?)
Pregunta por los secretos locales
Los DMC rebosan conocimientos locales, así que no tengas miedo de preguntar por esos lugares y experiencias fuera del radar que no encontrarás en Internet.
A menudo, la gente viaja para sentirse como lugareños o para entrar en contacto con un ritmo de vida diferente, y los DMC tienen los contactos para que eso ocurra. Ya se trate de un mirador oculto, un tranquilo café local o un festival de temporada, aprovechar estos «secretos internos» puede convertir un viaje en una auténtica aventura.
La comunicación es la clave
Las mejores asociaciones prosperan con una comunicación abierta. Las comprobaciones periódicas os ayudan a estar en sintonía y permiten hacer ajustes sobre la marcha.
Si estás organizando un itinerario complejo o un gran evento de grupo, incluso los pequeños detalles pueden marcar una gran diferencia. Comprobarlo con frecuencia también construye una relación más sólida y garantiza que tu proyecto vaya siempre por buen camino. Asegúrate de que la comunicación fluye en ambos sentidos, deja claras tus necesidades y averigua si hay algo que puedas hacer para facilitar el trabajo de tu DMC.
Sé franco sobre los presupuestos
Es fácil perderse entre todas las ideas y opciones que pueden ofrecer los DMC, pero fijar un presupuesto desde el principio ayuda a mantener las cosas manejables.
Informar a la DMC de tus parámetros económicos significa que puede centrarse en lo que es realista y sugerirte opciones que te ofrezcan la mejor relación calidad-precio. Los DMC tienen contactos locales para conseguir buenas ofertas y encontrar alternativas más baratas a los recargos de los turistas, por lo que a menudo pueden estirar tu presupuesto con más eficacia que un planificador externo.
Confía en su experiencia
Los DMC viven y respiran sus destinos. Conocen los entresijos del transporte local, las atracciones estacionales e incluso las preferencias culturales.
Aunque es natural querer opinar, confiar en su experiencia puede abrir la puerta a experiencias únicas que un plan estricto podría pasar por alto. Al fin y al cabo, es su casa, así que dejarles tomar la iniciativa en ciertos aspectos puede añadir profundidad y riqueza a la experiencia.
(Para más información sobre por qué deberías considerar asociarte con unDMC, lee¿Por qué utilizar un DMC?)
Ten un plan de contingencia
Los viajes pueden ser impredecibles, e incluso los planes mejor trazados necesitan una copia de seguridad.
Trabaja con tu DMC para poner en marcha algunos «Planes B», especialmente para cosas como actividades que dependen del tiempo o actos con muchas partes móviles.
Tener estos planes preparados ahorra estrés y mantiene la experiencia del cliente sin problemas, independientemente de lo que surja.
Obtén opiniones y haz un seguimiento
Tras el viaje o el acontecimiento, ponte en contacto para repasar lo que ha ido bien y lo que se podría mejorar. Esto no sólo es útil para futuras colaboraciones, sino que también muestra aprecio y crea buena voluntad, y evita que los problemas se enconen.
Cuando ambas partes mejoran con cada proyecto, se sientan las bases para asociaciones aún más fructíferas en el futuro.
Gira localmente, conecta globalmente con DMC de confianza
Asociarte con un DMC es como añadir un experto local a tu equipo. Con un poco de planificación, confianza y comunicación, puedes convertir un viaje estándar en una experiencia de la que los clientes hablarán durante años. Cada DMC aporta su propio conjunto de conexiones y experiencia, por lo que trabajar juntos puede añadir capas de autenticidad y valor difíciles de reproducir.